INBISA ha iniciado la entrega de las 28 viviendas que conforman Residencial INBISA HA48, una promoción ubicada en la calle Hurtado de Amézaga, en pleno corazón de Bilbao. Este proyecto marca un nuevo hito para la compañía, que ha demostrado una vez más su capacidad para gestionar y ejecutar obras de alta complejidad en entornos urbanos consolidados, cumpliendo rigurosamente con todos los compromisos adquiridos con sus clientes.
La ejecución de la nueva promoción ha requerido la demolición previa del antiguo edificio que databa de 1918, diseñado por el arquitecto Mario Camiña. Este inmueble albergó durante 90 años el histórico Restaurante Rimbombín, la marisquería más antigua de Bizkaia desde 1931, reconocida por el Ayuntamiento de Bilbao en 2006 con la ‘B’ de Ilustre. En su portal destacaban dos conjuntos cerámicos de azulejos de 1919, obra del reputado ceramista y pintor Daniel Zuloaga, considerado uno de los renovadores del arte ceramista en España. Estas piezas recreaban dos cuadros de Francisco de Goya -Baile a orillas del Manzanares y El cacharrero- y fueron donadas por INBISA al Ayuntamiento de Bilbao, junto con las columnas del frente de fachada, preservando así un valioso legado artístico.
Desde el inicio, el proyecto se planteó como un reto técnico y logístico: construir en una de las zonas más transitadas de la ciudad, minimizando el impacto en el entorno, el ruido y las molestias a vecinos y viandantes. La demolición entre medianeras y la posterior edificación de un total de diez plantas (siete sobre rasante y tres bajo rasante) en pleno centro de Bilbao ha supuesto un desafío exigente.
A pesar de estas dificultades, INBISA ha logrado mantener una ejecución impecable y una planificación eficaz, lo que ha permitido iniciar la entrega de las viviendas en los plazos previstos. Sara Macho, Directora Comercial de la Territorial Norte de INBISA, ha señalado: “La entrega de Residencial INBISA HA48 es un motivo de orgullo para todo el equipo. Hemos cumplido todos los compromisos con nuestros clientes, entregando sus viviendas en tiempo y forma, y lo hemos hecho en un entorno urbano exigente, con el menor impacto posible para el vecindario, el tráfico y los transeúntes”.
“Además, -continúan desde la compañía- hemos tenido la oportunidad de contribuir a la conservación del patrimonio artístico de la ciudad, donando las cerámicas históricas del edificio original. Esta nueva rehabilitación se suma a otras actuaciones emblemáticas que hemos realizado en Bilbao, como la del Edificio El Tigre en el barrio de Deusto, y los edificios Gran Vía 36 y Gran Vía 17, reforzando nuestra trayectoria en proyectos singulares y complejos en la ciudad”.
La promoción, con una superficie edificable sobre rasante de 3.220 m², ha tenido una acogida comercial excepcional, con el 100% de las viviendas, garajes, trasteros y locales comerciales vendidos meses antes de finalizar la construcción. Este éxito refleja la confianza depositada por los compradores en la propuesta residencial de INBISA, basada en la calidad constructiva, el diseño cuidado y la integración del proyecto con su entorno urbano.
“Los nuevos propietarios han valorado especialmente la calidad de los acabados de las viviendas, la ubicación estratégica, la funcionalidad de los espacios y el solárium comunitario en la planta de cubierta, con unas vistas espectaculares de la ciudad. Todos estos aspectos han sido clave en la decisión de compra de nuestros clientes y consolidan el posicionamiento de INBISA como referente en el desarrollo de proyectos residenciales singulares”, afirman desde la compañía.
Residencial INBISA HA48, ubicado en la calle Hurtado de Amézaga 48, frente a la Quinta Parroquia, está conformado por viviendas de 2 y 3 dormitorios, con superficies construidas que oscilan entre 90 y 140 m², muchas de ellas con terrazas a dos calles y acceso a una amplia zona de solárium comunitario en la cubierta. Cada estancia ha sido diseñada para maximizar la entrada de luz natural, creando ambientes cálidos, abiertos y confortables. El edificio incorpora soluciones sostenibles como sistemas de aerotermia y paneles solares fotovoltaicos, lo que le permite alcanzar una calificación energética A, que garantiza eficiencia y respeto con el medio ambiente. Además, cuenta con 30 plazas de aparcamiento, 20 trasteros y dos locales comerciales.
Más allá de su valor residencial, Residencial INBISA HA48 ha supuesto una mejora urbanística significativa para el centro de Bilbao. La construcción del edificio ha permitido la apertura de la calle Costa, conectando las calles Hurtado de Amézaga y General Concha, lo que mejorará la accesibilidad y la circulación peatonal, y generará un entorno más abierto, dinámico y atractivo para vecinos. Este tipo de intervenciones urbanas refuerzan el compromiso de INBISA con la revitalización de los núcleos urbanos, apostando por proyectos que no solo aportan valor a sus residentes, sino que también contribuyen al desarrollo y mejora del tejido urbano.
“Con este proyecto -concluyen desde la compañía- INBISA consolida su estrategia de desarrollar promociones residenciales singulares en ubicaciones estratégicas, combinando calidad, sostenibilidad y valor urbano. La compañía continúa evaluando nuevas oportunidades en Bilbao y su entorno, reafirmando su compromiso con la excelencia en la vivienda y la transformación positiva de las ciudades”.